El “suicidio turístico” de Lanzarote

El pasado mes de enero desde el Cabildo de Lanzarote declararon que no quieren “más camas ni más crecimiento”, teniendo la intención de declararse como «destino saturado turísticamente« e iniciar la senda del decrecimiento turístico. Además, al afirmar la Presidenta del Cabildo que su intención es atraer a otros mercados turísticos “de más gasto turístico” como el francés, italiano o el holandés, se pudo interpretar que sería en detrimento del “turista low cost británico”, precisamente -con diferencia- su mayor mercado, lo cual produjo el enfado de turistas y turoperadores ingleses (tourinews, 08.02.23).

Titulares de organizadores de viaje británicos disgustados con la declaración del Cabildo de Lanzarote

¿Qué tiene que ocurrir para que un destino como Lanzarote se autodeclare “zona masificada del turismo”, justo la única actividad de la que vive? Obviamente, hay un trasfondo electoralista (a pesar de ser un acto suicida económicamente), lo cual implica que el planificador habría identificado alguna sensación de masificación y/o aversión al turista en el electorado, o bien, peor aún, que habría detectado algún descontento social (p.ej. por alquileres altos, atascos de tráfico, etc.) y lo haya proyectado sobre el turismo. En ambos casos el planificador habría fracasado en su cometido, sea por no haber sabido dar una narrativa adecuada al turismo de forma que contrarreste los brotes de esa presunta turismofobia, o sea por no haber sabido gestionar los factores causantes del descontento social antes o cuando este se produjo.

Nótese que, en el caso de Lanzarote, no estamos ante síntomas puros del “sobreturismo” como se vieron en algunos destinos urbanos europeos como Amsterdam o Dubrovnik entre 2015 y 2019, como p.ej. atracciones turísticas saturadas (ver post de este blog: “ITB 2018(4): Recetas contra el overtourism”). Tampoco estamos ante un repentino nuevo récord turístico con 2,8M de turistas en 2022 (en 2017-2019 ya se habían superado los 3M; ver datoslanzarote.com). Ni tampoco ante un aumento de plazas alojativas; más bien lo contrario, de 71.136 plazas en 2019 Lanzarote bajó a 62.011 en 2022 (si bien de las plazas extrahoteleras perdidas una gran parte se incorporó al alquiler vacacional, que aumentó de 23.985 plazas en 2019 a 30.986 en 2022; ver datoslanzarote.com). Por tanto, no hay más turistas ni más alojamientos de los que había antes de la pandemia. Lo único que ha subido es la población (de 152.289 en 2019 a 156.112 en 2022). ¿No será que esté aquí el centro de la cuestión, y no en los turistas?

En la Jornada de Renovación y Modernización Turística que tuvo lugar la semana pasada (31.03) en el Hotel Santa Catalina, Rafael Castellano (Gerente de Castellano Consultores) mostró su preocupación por la pérdida de «plazas alojativas autorizadas» de Lanzarote durante la última década. Imagen: evolución del número de establecimientos en Lanzarote según modalidad (Fuente: diapositiva de la exposición de Rafael Castellano).

Por tanto, estamos ante una problemática que también se da en otras islas canarias y que se evidencia con infraestructuras viales congestionadas o precios de alquiler disparados. Ambas son cuestiones derivadas de una gestión económico-turística inexistente y de obviar la variable poblacional. El alquiler vacacional anárquico, pendiente de regulación desde 2018, la falta de inversiones en infraestructuras, la carencia de viviendas sociales (y viviendas en general) y la falta de desarrollo de una FP competitiva (que da pie a la necesidad de traer mano de obra exterior) son algunos de los principales ámbitos detrás de un descontento social que está ahí y que ahora se proyecta sobre el turismo. 

¿Las tiendas de campaña en la azotea de un edificio en Arrecife (Lanzarote), comercializadas en Airbnb como vivienda vacacional («camping urbano»), figuran entre las camas turísticas autorizadas?

Por tanto, ¿“demasiados turistas” o “demasiado poca gestión”? Más bien lo segundo, acompañado de una carencia absoluta de una narrativa adecuada sobre la importancia del turismo. Las claves de la estrategia a seguir nos las han dado los diferentes destinos urbanos afectados por “overtourism” en los años pre-pandemia como Amsterdam: evitar declaraciones suicidas & electoralistas y concentrarse en solucionar los problemas localizados de saturación, que tienen, en mayor o menor medida, todos los destinos maduros. Es decir, empezar a gestionar el turismo.

El turismo como chivo expiatorio (Fuente: Xavier Canalis, hosteltur).

En este contexto, Xavier Canalis, periodista de Hosteltur y autor de varias publicaciones turísticas, resume con esta frase perfectamente la situación comentada en párrafos anteriores (ver post de Xavier Canalis de la feria FITUR 2023):

Francamente, a mí lo que me quita más el sueño de este 2023 es que el turismo entre a lo bruto en campaña electoral, coincidiendo con las elecciones municipales de mayo. Es decir, que vuelva a ser chivo expiatorio de nuestros fallos como sociedad.”

Efectivamente, así ha sido, el turismo ha entrado, y a lo bruto, en la campaña electoral de Canarias. Y el grado demagógico no podía ser mayor: declaraciones de “zona masificada turísticamente”, una tasa turística (que se sobrepondría a la triple imposición a los vuelos a partir del 2024), una nueva moratoria turística y una ley de residencia que impida a extranjeros comprar casas ya forman parte de algunos programas electorales.

En definitiva, no es una cuestión de sobreturismo, sino más bien de infragestión, y justamente declaraciones como la de Lanzarote nos muestran que a las alturas de nuestro desarrollo turístico (otro destino canario, Maspalomas, cumplió el año pasado 60 años) aún quedan planificadores a cargo de la gestión estratégica que no han entendido ni lo más esencial del negocio turístico. Por tanto, en esta fase de transformación del turismo la clave va a ser una acertada gestión estratégica y, por tanto, se le viene encima un rol decisivo a los gestores de los destinos, que trataré en el siguiente post (“Falso overtourism y el rol de los gestores de destinos”). 

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Posts relacionados en este blog:

«Capacidad de carga: ¿cuántos turistas caben en Canarias?», noviembre 2022.
«…el Turismo no es el único potenciador de flujos de población. Por ejemplo, vemos que en paralelo vienen a las Islas jubilados a residir, nómadas digitales como residentes temporales o permanentes y trabajadores foráneos para sectores como la construcción, al no encontrarse trabajadores entre la población local…»

“ITB 2018(4): Recetas contra el overtourism”, marzo 2018.
«…En muchos casos se producen importantes aumentos de visitantes sobre infraestructuras que no se han desarrollado en más de 20 años, es decir, en las que no se ha invertido ni un sólo euro en décadas. Éste es el caso mencionado de la autopista Sur de Tenerife, en concreto su tramo del aeropuerto Reina Sofía hasta las Américas, que soporta con sólo dos carriles en incremento de visitantes y residentes de los últimos años. Aquí, al menos aisladamente, no podemos hablar de overtourism, sino de under-investment, es decir, de una falta de programación de inversiones en infraestructuras esenciales…»

Noticias relacionadas:

“Viajar acabará teniendo tantos impuestos como el tabaco”, Xavier Canalis, hosteltur.com, 25.03.23.
«La declaración de Lanzarote como destino saturado turísticamente es inminente», en tourinews, 03.02.23.
“Los británicos se toman las declaraciones sobre la masificación de Lanzarote como algo personal”, en tourinews.es, 08.02.23.
“Británicos, ante la intención de Lanzarote de buscar un mejor turismo: “Allí no hay nada más que nosotros y el clima””, diariodeavisos.elespanol.com, 06.02.23.
“La promoción de Mallorca en WTM siembra discordia con los hoteleros: “Con las cosas de comer no se juega””, en tourinews.es, 11.11.22.
“Fitur 2023 en tres ideas: ¿Qué hemos aprendido esta semana?”, Xavier Canalis, hosteltur.com, 20.02.23.


2 Responses to “El “suicidio turístico” de Lanzarote”

  1. Sinceramente seguir con el discurso de aumento de plazas turisticas hace mucho tiempo que cumplió su fecha de caducidad. Repase mínimamente el contexto del tiempo que vivimos y probablemente encontrará otras respuestas más adecuadas ya de este siglo.

    • Todo artículo de opinión necesita también la proyección de un punto de vista opuesto, máxime cuando está muy extendido. Gracias por esta aportación.

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