Alta demanda, retraso de rehabilitaciones y crecimiento cero
Canarias vuelve a ser uno de los destinos más demandados y para este invierno se barajan nuevas cifras récord en la llegada de visitantes internacionales. Estas mayores ocupaciones nuevamente vienen favorecidas por la inestabilidad de otros destinos, principalmente Egipto, competidor más importante de Canarias durante el invierno como destino de media distancia desde los mercados europeos. En vista de la posible rentabilidad inmediata, la alta demanda coyuntural para este invierno ha provocado, según información publicada, un retraso de la rehabilitación de algunos establecimientos en núcleos maduros (ver: “El buen año del sector turístico retrasa los proyectos de rehabilitación”, en laprovincia.es, 29.09.13).
Es decir, que a la dificultad de consenso (en comunidades de propietarios fragmentadas), a las dificultades de la financiación, a la dificultad de la rentabilidad y retorno de la inversión, a la casi infranqueable burocracia de las administraciones locales y a la lentitud de los Planes de Modernización (que en vez de planes de rehabilitación más bien parecen instrumentos de propaganda política) se le suma la alta demanda turística como un factor que puede retrasar un proceso de rehabilitación (¡lo cual no debe eclipsar las rehabilitaciones integrales que algunas empresas están haciendo a pesar del auge de la demanda y de las trabas administrativas!).
Sin embargo, este fenómeno “alta demanda artificial – posible retraso de reformas“ no es algo nuevo en Canarias, pues ha sido durante varios años consecuencia de la política de prohibición del crecimiento (“moratoria”). El crecimiento-cero convirtió a algunos núcleos turísticos jóvenes en “oligopolios artificiales”, es decir, la limitada oferta de camas en los núcleos más demandados recibía, aparte de su demanda natural, una demanda artificial por su estatus de formar parte de una oferta reducida, lo cual podría haber retrasado en algunos casos reformas necesarias (recordemos que la mayoría de los “núcleos jóvenes” en Canarias ya superan los 10 años de edad). Esto también podría ser aplicable a ciertas categorías con alta demanda con independencia del núcleo en que se encuentren.
En definitiva, el mismo efecto de alta demanda que ya afectaba a los proteccionismos creados por la política de crecimiento cero, ahora afecta a todo el destino por la exclusividad de Canarias como destino seguro de media distancia en invierno y, en ambos casos, puede derivar en retrasos de rehabilitaciones por no renunciarse a rentabilidades inmediatas seguras (“¿para qué renovar si ya tengo las camas vendidas?”).
En este contexto cabe recordar que los legisladores justificaron, y siguen justificando, la política de crecimiento cero con una supuesta situación de “sobreoferta de camas turísticas”. En términos económicos “sobreoferta” implica un desequilibrio entre demanda y oferta que afectaría a la oferta de forma global. Sin embargo, hemos visto que esto no es así: ha existido y existe una alta demanda para determinados núcleos, categorías y/o tipologías alojativas, demanda que se vio aumentada artificialmente por la política proteccionista y ahora nuevamente por los desvíos coyunturales. ¿Se sostiene así el mito de la “sobreoferta”? Evidentemente no.
Ello nos sugiere que dos mitos creados por el Ejecutivo canario con relación al crecimiento cero son falsos; que el crecimiento cero favorecería la rehabilitación y su justificación con una supuesta sobreoferta de camas. Ni lo uno, ni lo otro; más bien todo lo contrario:
(1) El crecimiento cero no favorece la rehabilitación, sino que la dificulta, tal como se ha expuesto anteriormente en el ejemplo de los “oligopolios artificiales” para el caso de que retrasaran reformas por una alta demanda artificial inducida por la política de crecimiento cero. Y en caso de retrasar reformas necesarias el producto envejece y pierde competitividad. Por tanto, la protección artificial de nueva competencia no garantiza el poder competitivo a medio-largo plazo. El obligar al cliente a reservar las plazas antiguas, dada la limitación de la oferta, en términos competitivos no es sostenible a largo plazo. El proteccionismo y la competitividad llevan signos opuestos. (Ver post anterior: “¿Perjudicarían a la rehabilitación nuevos hoteles de cuatro estrellas?”)
(2) No hay sobreoferta, sino alta demanda para determinadas camas: Canarias no tiene una sobreoferta de camas, sino una excesiva oferta de camas obsoletas, que es algo muy diferente. La “sobreoferta” (propia de una crisis estructural) afectaría a la oferta de forma global, es decir, a todas las categorías, tipologías alojativas y núcleos turísticos. Por el contrario, la “excesiva oferta de camas obsoletas” (propia de una fase de madurez turística), implica el envejecimiento de una parte de la oferta sin que exista una recesión en la demanda global por el producto “cama turística en Canarias”. Es más, determinados productos como los hoteles de cuatro estrellas tienen una demanda que supera a la oferta actual, llegando, en el caso de Gran Canaria, a desviarse en invierno a clientes demandantes de esta categoría a otras categorías o destinos.
Finalmente, resumo algunas de las múltiples paradojas que conlleva la actual política turística del Ejecutivo canario:
– Habiendo una gran demanda para determinados productos turísticos en Canarias se mantiene la prohibición de nueva oferta a través del crecimiento cero;
– habiendo una tasa de paro insostenible, sin estrategia concreta para reducirla, se mantiene la política de crecimiento cero;
– habiendo constatado que el proteccionismo no fomenta la rehabilitación, e incluso que favorece su retraso, se mantiene el crecimiento cero;
– habiendo constatado también que el lema “ni una cama más” ha resultado en Gran Canaria en un “muchas camas menos” (es decir, gran pérdida de capacidades) se mantiene el crecimiento cero.
Es hora de entender que el desarrollo sostenible no es posible sin crecimiento económico (el cual deber ser, a su vez, respetuoso) y que es necesario poner fin al crecimiento cero, al menos sustituyendo el lema del “ni una cama más” por un lema como “ni una cama menos”.
Artículos o noticias relacionadas:
“El buen año del sector turístico retrasa los proyectos de rehabilitación”, en laprovincia.es, 29.09.2013.
“La eternidad de la renovación”, en laprovincia.es, 10.09.2013.
Artículos relacionados en este blog:
“¿Perjudicaría a la rehabilitación nuevos hoteles de cuatro estrellas?”, abril 2013.
“¿Sobreoferta de camas turísticas?”, junio 2011.
“Leyendas urbanísticas: Los falsos mitos sobre la moratoria turística”, diciembre 2011.
Hasta ahora todo lo que he oído y leído de Antonio Garzón lo comparto. Es una de las personas mejor informadas en lo que respecta al turismo en las Islas Canarias. Tan es así, que en mi página WEB voy a poner un link a esta.
Saludos,
Sergio Alonso
Muchas gracias, Don Sergio, por su gentil comentario y por el enlace con su página web; ello anima a seguir analizando y escribiendo sobre la actualidad turística, esperando aportar algo a un cambio de criterios hacia lo positivo en las estrategias turísticas canarias. Un cordial saludo, Antonio Garzón